Sin una buena conexión, no hay teletrabajo…
Si hubiera que destacar alguna cosa positiva de 2020 en términos de empresa, sin duda el teletrabajo sería un firme candidato. Con una antelación inesperada (a causa del confinamiento forzado por la crisis sanitaria), el trabajo desde casa ha llegado para convertirse en una de las alternativas más claras para mantener la productividad sin necesidad de asistir presencialmente a nuestro lugar de trabajo habitual.
Celebrado por much@s y cuestionado por otr@s (aspecto que tratamos en este otro artículo), el teletrabajo requiere sobretodo de una buena conexión para desarrollarse con efectividad. A continuación, exponemos las dos principales soluciones de conectividad que lo permiten:
Entrar a nuestra red corporativa: la VPN
Se entiende por VPN (Virtual Private Network) la red virtual de uso privado que crea una empresa para controlar el acceso a su red interna desde fuera del sistema. La finalidad de la VPN consiste en proporcionar una conexión estable y segura a aquell@s usuari@s que necesitan utilizar los recursos de la compañía sin encontrarse fisicamente en ella. Algunos de sus puntos destacables son:
- Despliegue rápido: Configurando los correpondientes puertos en el firewall e instalando una aplicación de acceso en su dispositivo portátil, el usuario puede empezar a trabajar con normalidad en cuestión de minutos. Esto es lo que hace que la mayoría de empresas se decanten por la opción de la VPN.
- Misma infraestructura IT: El entorno informático seguirá siendo el de siempre, por lo que es recomendable buscar posibles weak spots y solucionarlos ahora que van a haber repetidos accesos a nuestra red desde el exterior.
- Hardware mínimo: Aunque es fácil de poner en marcha, la compañía debe asegurarse de que el ordenador (normalmente portátil) del empleado cumple con los requisitos mínimos para garantizar una conexión VPN aceptable, que le permita desempeñar sus tareas con fluidez sin perjudicar el ritmo habitual de trabajo. Además, dicho equipo debe ser proporcionado por la empresa.
- Control del ancho de banda: Toda VPN que se precie tiene prevista una limitación de ancho de banda en base a la cantidad de personas logueadas, asegurándonos una conexión sin cortes si el número de usuarios aumenta de repente; así nadie se queda sin poder trabajar.
- Seguridad y cierta lentitud: La conexió VPN nos protege gracias a su alto nivel de encriptación pero, al mismo tiempo, es más lenta porque la navegación se ejecuta a través de un tercero:
USUARIO -> VPN -> INTERNET
Según la web Statista, el volumen de mercado de las VPN será de casi 36.000 millones de dólares en 2022, más del doble que en 2016.
VDI, un escritorio en la nube
VDI son las siglas de Virtual Desktop Infraestructure (infraestructura de escritorio virtual). Esta solución provee al usuario de un puesto de trabajo online en el que trabajar exactamente igual que si fuese un sistema instalado en un dispositivo físico. El objetivo es conseguir una experiencia de uso mejorada, obteniendo beneficios como:
- Mayor potencia para tod@s: Las sesiones VDI se ejecutan en modo terminal server, es decir, que cualquier usuario dispone de la capacidad de procesamiento, almacenamiento y memoria RAM del servidor cliente, un equipo premium de altas prestaciones.
- Fácil gestión de altas y bajas: La creación de nuevos puestos de trabajo se realiza en base a plantillas, por lo que es muy sencillo dar de alta un nuevo escritorio cuando se incorpora un nuevo trabajador. Y lo mismo para las bajas.
- Data centers de primer nivel: Proveedores líderes del sector como Microsoft Azure, Amazon Web Services o Google Cloud ofrecen múltiples capas de seguridad para mantener a salvo los datos de l@s usuari@s.
- Sin mantenimiento: Al contrario que en la VPN, el mantenimiento de los escritorios virtuales corre a cargo del proveedor del servicio, así que no tenemos que preocuparnos por renovaciones de licencias o actualizaciones de software.
- Inversión mínima: Al trabajar con una máquina virtual, no es necesario comprar nuevo hardware. ¡Cualquier dispositivo que pueda conectarse a Internet ya nos sirve!
- Continuidad: Podemos desconectarnos y reconectar más tarde desde otro dispositivo, pudiendo retomar nuestra sesión de trabajo donde la habíamos dejado.
En este enlace puedes obtener más información al respecto.
¿Cuál es la opción más recomendable?
Aunque solo hemos expuesto una visión general de cada modalidad, ambas son perfectamente válidas para trabajar remotamente. Tanto la conexión VPN como los escritorios virtuales VDI son opciones correctas, y solo hay que averiguar cuál es la que más le conviene a nuestro negocio.
Si no queremos arriesgarnos y preferimos mantener nuestra infraestructura IT, solo habrá que invertir en la adquisición de los portátiles que se conectarán a nuestra red a través de una VPN. Aunque seguirá requiriendo un mantenimiento regular y la supervisión de un servicio especializado, es la alternativa más conservadora.
Por el contrario, si deseamos contratar un servicio integral que nos acerque más a la filosofía cloud de trabajo colaborativo hacia la cual está evolucionando el mercado, la opción más recomendable es una VDI. Nuestra empresa proyectará una imagen de marca más actual, sin hablar de las numerosas ventajas antes mencionadas y la confirmación de que apostamos por la Transformación Digital para seguir siendo competitivos.
Lo que nadie pone en duda es que tanto la VPN como la VDI han conseguido cambiar la forma de trabajar de miles de personas. En ese sentido, una vez tomada la decisión de incorporar el teletrabajo en nuestro día a día profesional, es aconsejable solicitar varios presupuestos, escoger la opción más factible y proporcionar a los trabajadores la formación y la motivación adecuada para que consigan adaptarse en el menor tiempo posible.