En ocasiones, hay términos cuyo uso se normaliza aunque no se conozca demasiado bien su significado. Esto es lo que ha pasado, en cierta manera, con la transformación digital. Repetida hasta la saciedad como un mantra tibetano, sigue siendo una expresión que aún genera dudas respecto a su correcta aplicación, así que vamos a intentar arrojar un poco de luz sobre ello…
¿Qué es el plan de transformación digital?
Igual que cualquier otra estrategia empresarial que tiene como objetivo mejorar la productividad de la compañía, ya sea actualizando maquinaria que ha quedado obsoleta o incorporando procedimientos mejorados, la transformación digital no es más que la evolución de la empresa a nivel tecnológico para poder afrontar las necesidades del actual mercado.
Dicho proceso, por consiguiente, empezará con la creación y ejecución de un plan que aborde los flujos de trabajo de la compañía con sus clientes y proveedores y con sus propios recursos humanos internos desde un punto de vista digital, siendo necesario renovar o incluso sustituir ciertos elementos hardware y/o software para optimizar dichos flujos y conseguir cambiar la actual idiosincrasia corporativa por un modelo más competitivo.
Puntos clave para la transformación digital
Crear y ejecutar el plan de transformación digital, como hemos apuntado antes, es solo el primer paso para conseguir adaptarse al mundo virtual y aprovechar todas sus ventajas. A continuación, se describen algunos aspectos esenciales que deben tenerse siempre en cuenta:
- El mapa de implementación digital debe ser lo más detallado posible y contar con todos los pasos que deben darse, de forma bien planificada.
- Toda la organización debe tener una actitud abierta al cambio.
- La digitalización tiene que afectar a toda la empresa y no solo a áreas específicas como las de Marketing o Comunicación.
- La base de esta digitalización pasa por crear canales de comunicación internos y externos; apoyados en las nuevas tecnologías, obviamente.
- El objetivo de todo el proceso debe ser brindar al cliente una mejor experiencia en todos los sentidos.
Los beneficios de aplicar el plan de transformación digital
Según el informe de digitalización empresarial publicado el 20 de mayo de 2020 por el BEI (Banco Europeo de Inversiones), España se encuentra por encima de la media europea y ocupa la posición nº 20 del ranking respecto al resto del mundo. No obstante, dicho informe coloca a nuestro país en la zona «moderada», lo cual indica que aún hay mucho por hacer para alcanzar una completa digitalización de nuestro tejido empresarial. Por ello, es conveniente recordar algunos de los beneficios de un buen plan de transformación digital.
Por ejemplo, la experiencia del cliente. Sin duda, uno de los objetivos principales es conseguir una relación más cercana y estrecha con el usuario de los servicios de una compañía, ya que se genera una imagen de marca superior y se favorece la fidelidad del cliente.
Esto permite ampliar el campo efectivo de clientes a los que se puede llegar. En ese sentido, la digitalización también abre un nuevo mundo de oportunidades de venta como el e-commerce, que estos últimos tiempos se ha visto reforzado con otro de los conceptos más interesantes de la implementación digital: el big data.
A través de los datos y la información recogida por los canales digitales, se pueden crear campañas de comunicación más efectivas que ofrezcan un mayor impacto con inversiones mucho más reducidas.
6 skills fundamentales para liderar la transformación digital
Ser el líder para impulsar la transformación o adaptación al entorno digital en una compañía requiere poseer la máxima cantidad de las siguientes habilidades:
- Tener experiencia digital.
- Ser hábil con la información.
- Capacidad para trabajar en equipo.
- Espíritu constante de mejora.
- Pensamiento estratégico.
- Centrarse en la satisfacción del cliente.
- LA MÁS IMPORTANTE: CREER en ello y transmitirlo así al resto de participantes del proyecto.
La importancia de la empresa en la ejecución del plan de transformación digital
Tal como acabamos de comentar en el anterior apartado, es esencial valorar la importancia de la cultura empresarial de la compañía, ya que todos sus miembros se deberán esforzar para alcanzar una óptima transición digital. No son pocos los directivos que, más animados que informados, se encuentran con que sus equipos no tienen la cultura empresarial suficiente para ello, en cuyo caso es aconsejable mejorar la comunicación con los equipos cercanos y crear un ambiente de proactividad y reconocimiento laboral que aumente la identificación con el objetivo a alcanzar.